La ciudad de Comodoro Rivadavia atraviesa una situación crítica en el ámbito sanitario. Desde hace más de una semana, los anestesistas que trabajan en los hospitales públicos y las clínicas privadas están de paro por tiempo indeterminado. La medida de fuerza afecta a las cirugías programadas, que se encuentran suspendidas hasta nuevo aviso.
Los anestesistas reclaman una mejora salarial y laboral, así como el pago de los sueldos adeudados por el gobierno provincial. Además, denuncian la falta de insumos y equipamiento adecuado para realizar su trabajo.
El paro solo contempla la atención de las urgencias y los pacientes oncológicos, que requieren tratamientos paliativos o curativos.
Los demás casos quedan postergados hasta que se resuelva el conflicto. Esto genera una gran incertidumbre y angustia en las personas que necesitan someterse a una intervención quirúrgica.