Se trata de los cabos primero Hugo Alvarez y Carlos Morales que el 26 de mayo cuando realizaban un servicio adicional en un boliche de la calle Libertad de Rawson, golpearon a Joaquín Freeman de 18 años de edad que además se encontraba alcoholizado. Las cámaras de seguridad fueron determinantes.
Mostraron cómo primero Alvarez pateaba en las piernas a la víctima para luego Morales patearlo a la altura de la cadera y piernas y una vez con la víctima reducida en el piso, arrojarle una última patada en el abdomen. Las lesiones fueron consideradas leves pero suficientes para que la víctima realizara la denuncia en la Fiscalía de Rawson.
Avanzada la investigación, a través del abogado defensor de ambos, el doctor Matías Cimadevilla, ofrecieron someterse a la aplicación del llamado “juicio abreviado” que implica el reconocimiento de los hechos por parte de los autores, las pruebas existentes en su contra, haber sido coautores y la calificación legal acordada: lesiones leves agravadas. De esta manera evitaron ir a juicio oral y público con la posibilidad de una pena más grave.
La víctima Freeman estuvo de acuerdo y en la audiencia realizada este martes en la Oficina Judicial de Rawson se lo estuvo esperando, pero no concurrió.
El acuerdo entre el defensor y la fiscalía fue convalidado por el juez de garantías Sergio Píñeda que interrogó a los imputados que verbalmente estuvieron de acuerdo en todos sus aspectos. La investigación fue realizada por el funcionario de fiscalía Leonardo Cheuquemán supervisada por el fiscal jefe de Rawson, Fernando Rivarola.