Durante la noche del miércoles 18 de mayo de 2011 se precipitó a tierra, en medio de la meseta rionegrina, un avión de Sol Líneas Aéreas que había hecho escala en el aeropuerto de Neuquén y que tenía como destino final Comodoro Rivadavia. Murieron sus 19 pasajeros y los tres integrantes de la tripulación. En febrero último, un juez federal reabrió la causa e imputó por el accidente a exdirectivos de la compañía.