Las cenizas de Hebe de Bonafini, última presidenta de Asociación Madres de Plaza de Mayo, fueron esparcidas este jueves a la tarde en la Plaza de Mayo, en una multitudinaria y emotiva ceremonia de la que participó el gobernador Axel Kicillof, entre otros dirigentes políticos, sociales y gremiales, además de referentes de la cultura.
Como es tradición cada vez que fallece una de las integrantes de la Asociación, las cenizas de Bonafini fueron depositadas en un hoyo cavado en el jardín del perímetro que rodea la Pirámide de Mayo, momento que fue acompañado por otras integrantes de Madres, en medio de un fervoroso aplauso que derramó al resto de la histórica plaza.
La plaza desbordó las expectativas de las Madres que convocaron a participar de su tradicional ronda de los jueves para homenajear la memoria y legado de quien fue su presidenta desde 1979, fallecida el domingo pasado a los 93 años.
Poco antes de las 15.30, la camioneta que habitualmente trasladaba a Hebe y al resto de las integrantes de la Asociación, ingresó a un Plaza de Mayo colmada de banderas y fotos de la referente de derechos humanos, donde fueron recibidas con aplausos y muestras de afecto por una multitud, entre las que se encontraba el gobernador bonaerense, Axel Kicillof, y el dirigente de La Cámpora y ministro de Desarrollo de la Comunidad de la provincia, Andrés "Cuervo" Larroque, entre otros dirigentes de distintos sectores.
Entre los presentes se alcanzó a ver a la cantante Teresa Parodi, el Padre Paco Olveira, del Grupo de Curas en Opción por los Pobres; el presidente Amado Boudou, el gremialista Daniel Catalano (ATE-Capital), y al ministro de Trabajo bonaerense, Walter Correa.
Bonafini, en un video que la asociación publicó en sus redes sociales el domingo pasado, había expresado que: "El día que yo me muera no tienen que llorar, tienen que bailar, tienen que cantar, hacer una fiesta en la plaza porque hice lo que quise y dije lo que quise".