El intendente Carlos Linares recorrió durante la mañana de ayer las obras finalizadas correspondientes a la primera etapa del desagüe pluvial del barrio Caleta Córdova y la segunda etapa del desagüe pluvial del barrio Castelli. Estuvo acompañado por viceintendente –e intendente electo- Juan Pablo Luque; el secretario de Gobierno, Ricardo Gaitán; el secretario de Infraestructura, Luis Romero; la secretaria Privada, Liliana Peralta; y el concejal Maximiliano Sampaoli.
“Se trata de dos obras más que este municipio pudo concretar para mejorar las condiciones de vida, en este caso, de las familias de los barrios Caleta Córdova y Castelli; sobre todo ante situaciones de inclemencias climáticas. Cuando es infraestructura de pluviales, redes de gas, suministro de agua potable y tendido eléctrico, estamos hablando de acciones y políticas para dignificar a los vecinos”, expresó Linares.
Explicó que la demanda de las mencionadas obras surgió después del temporal de 2017 y en ese sentido aseguró: “este acontecimiento nos instó a repensar la obra pública de la ciudad con infraestructura que brinda soluciones integrales; y en cuanto a los pluviales fueron diseñados de forma tal que se podrá ingresar con maquinaria para su mantenimiento y saneamiento”.
A la vez, Linares hizo hincapié en el ritmo de la obra pública que se sostuvo a lo largo de su gestión que concluirá el 10 de diciembre. “Hoy podemos finalizar el mandato municipal con muchas obras inauguradas, otras tantas en un buen grado de avance y un paquete de licitadas. Estas últimas garantizarán la misma línea de trabajo para los próximos meses”, indicó.
SECUELAS DEL TEMPORAL
El secretario de Infraestructura, Luis Romero, explicó las características técnicas de las obras inauguradas y la importancia que tienen para la comunidad de los barrios Caleta Córdova y Castelli.
Sobre la primera etapa del desagüe pluvial de Caleta Córdova, detalló: “con el temporal de 2017 desapareció el entubado, que era de un diámetro importante; y en función de ello, se tomó la decisión de ampliarlo en el cruce de la ruta 1 y construir un canal a cielo abierto, lo que nos permitirá ingresar con maquinaria para su limpieza y mantenimiento”.
Añadió: “en sus proximidades, también se procedió a realizar una intervención a nivel cloacal, porque los efluentes del sector terminaban en el pluvial, generando un foco infeccioso”.
Respecto a la segunda etapa del desagüe pluvial en el barrio Castelli, indicó: “es un pluvial que tiene un tramo a cielo abierto y funciona como la conexión de todo el agua que cae de la ladera de los cerros, la ruta y la banquina. Ahora esto es conducido hasta una cámara de inspección y mediante un entubado se lo dirige hacia el arroyo Belgrano”.