De los fallecidos por COVID-19 desde el inicio de la emergencia sanitaria, 234 corresponden a Río Gallegos, 120 a Caleta Olivia, 23 a El Calafate, 17 a Pico Truncado, 11 a Puerto Deseado, 10 a Las Heras, 8 a Puerto San Julián, 1 a Cañadón Seco, 1 a Río Turbio, 1 a Perito Moreno y 1 a Los Antiguos, a los que suma un suicidio ocurrido en Caleta Olivia.
Otro reflejo de la peligrosidad del virus se refleja en la ocupación de camas UTI adultos de hospitales públicos ya en Río Gallegos están colapsadas (100 %), en tanto que en Las Heras llega al 80 %, en Pico Truncado al 75%, en El Calafate al 58%, en Caleta Olivia al 53 % y solo en Puerto Deseado no hay personas internadas en terapia.
Respecto a los contagios que permanecen activos, la mayoría de ellos, 1339, corresponden a Río Gallegos (incluidos de represas), 659 a Caleta Olivia (incluidos de Cañadón Seco y Fitz Roy), 488 a Las Heras, 486 a Pico Truncado (incluidos de Koluel Kaike), 425 a El Calafate (incluidos de represas), 169 a Puerto San Julián (incluidos de minera), 162 a Perito Moreno (incluidos de minera), 130 a Puerto Deseado (incluidos de minera) 107 a 28 de Noviembre, 31 a Gobernador Gregores, 25 a Río Turbio, 17 a El Chaltén, 4 a Los Antiguos y 2 a Piedra Buena.